Que buen insomnio si me desvelo sobre tu cuerpo
Mario Benedetti
La noche incandescente acoge palabras vacías que despegan de mi boca hacia un papel mojado; con ganas embriagadoras, mi mente sueña en blanco. Ningún alarido gris limpia el día que he evitado. Hablo, sin tregua, de nobles y pardas envidias donde la voluntad que las forja es la misma que las vuelve tierra.
Tengo seis granos de café en el quicio del despropósito.
Moriré de insomnio por miedo a la vigilia. Moriré de vida, cueste lo que cueste, pues si morir de vida puedo, lo prefiero a vivir muriendo.
XiViRiFlÁuTiC!!!
Descanse en paz Miguel Delibes.